El espejo: rosa negra.
a E. y C.
Ay, rosa negra,
yo no creo en las rosas de acero,
tu con tus espinas, dagas,
falos,
sueños y dedos finos.
Tapate del frio
que eres tan fragil y bella.
Yo, tu bardo,
tengo tijeras de podador:
dicen que tienen palabras,
yo solo veo susurros.
Abre tus petalos,
que entren los rayos lunares,
dime al oido
lo que tus lagrimas beben
y tus sollozos cantan.
Dejame soplar besos
para que respires mi sabor,
y tus penas
se arrojen como sal a la tierra.
9 de noviembre de 2009
El espejo: rosa negra
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1 comentarios:
¿Dónde estás, bardo podador?
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